Avanza ley de semillas de Bayer - Monsanto y crece resistencia social en Argentina
Ley de Semillas: Un dictamen que es
un Martes 13
Ayer, martes 13/11, en el plenario de comisiones de
agricultura, presupuesto y legislación de diputados, los legisladores
que responden al gobierno firmaron dictamen y avanzan hacia votar en el recinto
una nueva Ley de Semillas.
Después de meses de negociaciones cerradas entre un
puñado de corporaciones con funcionarios y legisladores; y tras el circo de
“escuchar a todas las voces” en la comisión de agricultura, el agronegocio
logra con el dictamen dar un paso importante para tener una ley que termine con el
derecho al “uso propio” de las semillas por los agricultores, y permita que las
empresas cobren regalías cada vez que un
productor vuelva a utilizar “sus” semillas sujetas a derechos de obtentor.
No sorprende de un gobierno que pobló su
organigrama con representantes del agronegocio, y que vienen transformando en
palabra oficial todos los latiguillos con que las empresas intentan ocultar las
consecuencias nefastas de este modelo para el ambiente y la salud de las
poblaciones. La aprobación de una Ley de Semillas en los términos que están
planteados, implica cercenar derechos de lxs agricultorxs y ampliarlos para las
corporaciones que, así, profundizarían su control sobre la cadena
agroalimentaria.
Adentro
Abierto el debate en el plenario, las
intervenciones de distintxs diputados fueron dejando en evidencia el modo con
que el oficialismo llegó a esta instancia: Un desfile de borradores volaron
desde y hacia los teléfonos de asesores y legisladores: “el de la mañana”, “el
de ahora”; pedazos de texto tirados por whatsapp; correcciones que alteraban en
sentidos opuestos párrafos enteros. En ese caos el oficialismo logró cerrar un
texto y dictaminar sólo con las firmas de Cambiemos, mientras el resto del arco
político reclamaba seriedad y vuelta al trabajo en comisiones. Antes de
finalizado el debate la hoja para firmar el dictamen ya estaba circulando. De
esta manera marchan al debate en Diputados.
Por sobre cualquier funcionamiento “normal” de
nuestra (muy) imperfecta democracia y “las instituciones” que este gobierno
dijo venir a refundar, quedó clara la primacía del lobby corporativo. Así, la decisión política de terminar con el
derecho de uso propio de lxs agricultorxs, acordado con las corporaciones, dejó
a “los representantes del pueblo” del bloque Cambiemos haciendo el ridículo. Sólo el blindaje
mediático evita que lo que pasó ayer sea un escándalo.
Afuera
El contraste con lo que pasaba en paralelo en la
calle no podía ser mayor: un conjunto grande de organizaciones del campo y
la ciudad nos manifestamos para denunciar las
maniobras en curso y organizarnos contra este saqueo. La vereda del Congreso se
volvió a vestir de verde con el feriazo de la Unión de Trabajadores
de la Tierra (UTT), y a llenarse de banderas con
las nutridas delegaciones del MTE Rural y el MNCI-Vía Campesina que se
llagaron, aún con muchos de sus barrios inundados por las tormentas de horas
antes. Las organizaciones que integramos la Multisectorial, junto con las
organizaciones campesinas y distintxs compañerxs de gran trayectoria realizamos
una conferencia de prensa
que inició con la lectura del documento conjunto al que adhirieron casi 300 organizaciones
de todo el país en apenas 2 días.
La voz campesina e
indígena
Cuando Norita Cortiñas dijo presente comenzamos. Por la Multisectorial
contra la Ley Bayer-Monsanto de Semillas tomaron la palabra Carla Poth y Tamara
Perelmuter, seguidas por Lalo Botessi de la Cátedra Libre de Soberanía
Alimentaria de la escuela de nutrición (UBA).
La palabra campesina corrió por cuenta de
representantes por cada organización presente:
Maritsa Puma, productora agroecológica de la UTT, dijo “nos hicieron creer que las semillas
criollas no sirven. Nosotros decimos q es mentira, producimos sin sus
agroquímicos y sin sus semillas y alimentamos al pueblo. Producimos de manera
agroecológica desmintiendo todo lo que ellos dicen”. Y llamó a la unidad, ya
que una ley como pretenden “no sólo nos afecta a nosotros como agricultores,
también a ustedes que consumen, todos tenemos que unirnos para la soberanía
alimentaria. Lo pide a gritos”.
Marcando contrastes con el agronegocio, Nilda Avendaño, venida del cordón hortícola del Gran La Plata e
integrante del MTE Rural, dijo “Nosotros producimos para este
pueblo”. “Estamos haciendo la prueba de producir agroecológico y funciona de lo
mejor”. Sobre la modificación de la ley: “Si se aprueba esta ley nosotros vamos
a producir a un precio más caro o directamente nos expulsarán de la tierra.
Nosotros nos hacemos la semilla; cuando tengo yo las paso a mis compañeros que
necesitan, y cuando yo no tengo ellos me pasan a mí”. Y remató “queremos que se
produzca la reforma agraria”.
Desde Santiago del Estero Román, Micaela y
Constanza tomaron la palabra por el MOCASE-Vía
Campesina, integrante del Movimiento Nacional
Campesino Indígena (MNCI): “Estamos acá para decirle no a
esta ley” que implica “desalojos y migración de las familias campesinas a los
barrios urbanos”. “Las semillas que nos dejaron nuestros ancestros son un
camino, son el presente y el futuro”. “Somos de la Universidad Campesina, cómo
jóvenes de la organización apostamos a la reproducción y multiplicación de las
semillas que son la base de la soberanía alimentaria. Es claro que el objetivo
de modificar esta ley es económico y no alimentar a los pueblos como hace la
producción campesina”.
Carlos Vicente (GRAIN – Acción por la Biodiversidad) comenzó rescatando la amplitud de la
convocatoria. “Me parece central decir que las semillas las crearon las
comunidades campesinas y los pueblos originarios hace 10.000 años y no las creó
ningún agrónomo ni ninguna corporación. Son creación campesina e indígena y
seguirán en sus manos” y “lo que las corporaciones sí lograron en estos 60 años
es destruir gran parte de las semillas que se crearon en los 10.000 anteriores.
Nos dejaron con un cuarto de las semillas. Nos están llevando a un camino sin
salida, como lo hacen con el cambio climático y la pérdida de biodiversidad”.
“Se va a recordar este tiempo como el tiempo en que se robaron las semillas,
inventando los derechos de obtentor, los híbridos y los transgénicos entre
tantas cosas”. “La soberanía alimentaria, y las semillas como patrimonio de los
pueblos al servicio de la humanidad es una bandera por la que vamos a seguir
peleando, con o sin ley”.
Cerrando Norita: “Las semillas son nuestras y son la vida. Esta es
la lucha que estamos dando. Defender el agua, la tierra y la semilla que es defender
la soberanía nacional” en contraste “a esta situación que estamos viviendo con
el FMI y estos 20 que vienen a reforzar el hambre”. “No al pago de la deuda que
no hicimos nosotros sino que empezó con los militares que secuestraron a
nuestros hijos”. “Hoy tenemos que luchar para que no salga esta ley, pero si
saliera sabemos que mañana tenemos que estar en la calle, ni un día tenemos que
darnos por vencidas”. El cuerpo más frágil, terror de los poderosos, repitiendo
como un mantra “hay que estar en la calle”.
Sobre el final Nilo Calluqueo de la comunidad mapuche de Los Toldos, denunciando
las consecuencias del modelo de agronegocio. “Los mapuches tenemos toda una
historia de cultivo aunque digan que éramos nómades”. “Estamos invadidos por
todas estas trasnacionales”. También hablaron Miryam Gorban de la CaLiSA de Nutrición y Walter Pengue de GEPAMA-FADU.
Contrastes
Sobre el final de la tarde, cuando se vendían los
últimos cales y lechugas del feriazo, la noticia de que habrían firmado el
dictamen se fue confirmando.
En la calle el cansancio y el calor se fueron
mezclando con la bronca por la maniobra consumada pero también con lo
reconfortante que es haber logrado la unidad que se expresó en toda la jornada.
La brutalidad de los de arriba adentro; la unidad de lxs de
abajo afuera.
Nos preparamos para seguir dando el debate adentro
y afuera del Congreso. Invitando a los legisladores a rechazar el texto
en la votación si este llega a incluirse para el tratamiento de la sesión del
21/11; y preparándonos para movilizar nuevamente junto a todxs lxs que estén dispuestxs a defender
los derechos campesinos y a apostar por la soberanía alimentaria de nuestro
pueblo.
El agronegocio consiguió el dictamen a lo pirro, de
la mano de la genuflexión de la clase política en una maniobra escandalosa;
pero acá no se rinde nadie y como dice Norita: venceremos!
miércoles 14/11/2018
Comentarios