Productores (de Nicaragua) temen por introducción de Semillas Transgénicas
El Consejo Nacional de Cooperativas (CONACOOP), realizó una capacitación para discutir sobre las razones para prohibir los cultivos transgénicos en Nicaragua, entre ellas, unas 200 mil familias campesinas que cultivan maíz y frijoles, se verían afectadas en su derecho a sembrar sus propias variedades, por el riesgo de cruce y contaminación genética provocadas por los cultivos transgénicos, aumentando así la pobreza y la dependencia.
Nicaragua firmante de tratado
Nicaragua es firmante del Tratado Internacional sobre los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la agricultura, que desarrolla la FAO, en este acuerdo los países se comprometen a proteger el conocimiento tradicional de los agricultores y el uso beneficioso de sus semillas criollas. Por ello, el Consejo Nacional de Cooperativas, realizó una reunión con productores para dar a conocer en qué consiste este tratado y cuáles son sus derechos.
Banco de Semillas
El Programa de Campesino a Campesino desde hace 8 años, ha logrado conformar 412 bancos de semillas criollas, con el fin de fortalecer la seguridad alimentaria de los pequeños y medianos productores y de la población en general. Según Carlos Vidal, promotor de este programa, los dueños de parcelas o tierras llegan a retirar semillas para cosechar y luego cuando obtienen el producto retribuyen lo que se les dio.
La Coordinadora de Mujeres Rurales (CMR), también asistió a este encuentro, en el cual las féminas que forman parte de ella, mostraron sus puntos de vista conforme a la diferencia que existe entre las semillas transgénicas y las semillas criollas.
De igual forma la Federación Agropecuaria de Cooperativas de Mujeres Productoras del Campo de Nicaragua (FEMUPROCAN), que la integran 4 mil mujeres y 64 cooperativas, expresó que las semillas criollas son las mejores para cultivar y cosechar productos saludables y de calidad.
Los productores alegan que las semillas transgénicas son un ataque a la soberanía nacional, porque al introducirlas al país, las empresas multinacionales violarían las leyes nacionales y ponen en riesgo los recursos genéticos.
Margin Pozo / Periodista de Notivos
mpozo@vostv.com.ni
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